El recién elegido Papa León XIV, anteriormente Fray Robert Francis Prevost, conoció la ciudad de San Fernando en el año 2003 durante una visita canónica que el ahora Santo Padre efectuó en su calidad de Prior General de la Orden de San Agustín en Chile a diversas comunidades religiosas, entre ellas las parroquias San Agustín y Santa Rita de la capital de la provincia de Colchagua.
En la oportunidad, el nuevo Papa fue recibido por el Reverendo Padre Enrique Catalán Ossa, párroco agustino.
Fieles de la zona recuerdan con mucho cariño y afecto la visita efectuada hace 22 años a la ciudad de San Fernando por el Fray Robert Prevost, quien esta semana fue elegido como el Papa 267, lo que marca un hito histórico, ya que es el primer obispo estadounidense y miembro de la Orden de San Agustín en ocupar el cargo.
Su experiencia en América Latina y su fluidez en español destacan su cercanía con las comunidades de nuestro continente, incluyendo Chile y por su puesto San Fernando y la Región de O´Higgins.
El párroco de San Agustín de San Fernando, Padre Sixtus Uwague se mostró muy contento por la elección del nuevo sumo pontífice a quien tuvo la oportunidad de conocer personalmente cuando era seminarista en Nigeria.
“Yo conocí al Papa en mi período de formación sacerdotal en Nigeria, mi país natal. El nuevo Santo Padre es un hombre muy sencillo y cariñoso, muchas veces estuvimos en la misa tocando instrumentos y cantando. Él siempre estaba muy preocupado por nosotros los seminaristas. Destaco su tremendo espíritu misionero, pastoral, espiritual y también comunitario”, argumentó el religioso.
Por su parte el obispo Guillermo Vera sostuvo que “como creyentes apoyemos al Papa en esta misión que Dios le ha encomendado. Él necesita de nuestra oración ya que es muy grande la responsabilidad que ha caído entre sus hombros, él tiene que iluminar no solo la vida de la iglesia sino también una luz en medio de nuestro mundo, que su palabra tenga la fuerza del espíritu santo y que sus gestos puedan ser motivantes para todos”.